El movimiento estudiantil en el Ecuador - Breve Acercamiento.

Sin no existe una organización fuerte con experiencia de lucha política en cualquier situación y en cualquier período no se puede ni hablar de un plan sistemático de actividad, basado en principios firmes y aplicado rigurosamente, del único plan que merece el nombre de táctica. V. I. Lenin

La universidad es siempre el espejo de la sociedad y actualmente la sociedad ecuatoriana, específicamente los sectores políticos que tuvieron un auge en la última década vienen experimentando una debacle y crisis interna, no solo en los exponentes de la izquierda, sino que incluso las nuevas propuestas de la derecha se han visto mermados y fraccionados ante la postura que se debe tomar post Rafael Correa.

---

Históricamente tras un gobierno fuerte se sobreviene un proceso de reorganización política, como ejemplo veamos el período conocido como “La Restauración” en la época post napoleónica en Francia; en el Ecuador estamos pasando por ese momento, con la reconfiguración de fuerzas, recambio de sectores y la disputa de nuevos liderazgos en diferentes niveles de representación.

La representación estudiantil sufrió un revés muy duro en nuestro país, en primer lugar por la nefasta administración del gremio estudiantil por parte del PCMLE en su representación del FRIU (hoy Transformación Universitaria) y de la FESE, y en segundo lugar por la incapacidad de quienes quitaron la representación estudiantil a los “chinos”, de generar política responsable y digna de sus representados.

Los movimientos estudiantiles pasaron a ser pro gobierno o anti gobierno sin que se generase una capacidad de análisis crítico, se perdió el papel generador de liderazgo de la universidad y jamás se posiciono sus aportes académicos, esto lleva a que el renacer de “Los Chinos” en nuevas formas más digeribles (en las actuales elecciones se presentan como Consenso por la U) , sea un temor real en las universidades públicas.

Por otro lado, las universidades privadas se han encerrado en burbujas que las alejan de la participación activa en la sociedad de forma tanto política como académica, los liderazgos en su generalidad plegaron al trabajo con el gobierno con diferentes matices y en clara confrontación a las autoridades universitarias en su mayoría anti gobierno.

El movimiento estudiantil paso de ser botín político a ser consecuencia de la desmovilización social, y desde este punto partimos este momento; el retorno de el MPD (hoy Unidad Popular) bajo un rostro más sonriente (miren sus logos), nos presagia que en caso de ganar, lucharan por secuestrar nuevamente la educación y utilizar la violencia como método de chantaje para con el gobierno de turno.

Utilizando de punta de lanza a rostros visibles faltos de formación política y conciencia histórica sobre el daño que causaron a nuestras universidades, viciando la representación estudiantil de prácticas perversas y retomando practicas que tuvimos la oportunidad y no lo hicimos, hoy la universidad pública está muy cerca de caer ante un nefasto Consenso en el cual los únicos que perderán serán los estudiantes.

El libre ingreso, el cogobierno, la democracia han sido hace mas de 50 años su bandera de lucha y jamás mientras estuvieron en el poder aplicaron lo que predicaron, siendo los grandes causantes de la mediocridad del sistema educativo ecuatoriano que recién como sociedad intentamos rescatar, que el futuro nos juzgue por dejarlos volver.

Mientras tanto los estudiantes de las universidades privadas siguen encerrados en su burbuja, siguen ajenos a la conformación de un movimiento estudiantil fuerte y no inciden en la sociedad, la universidad privada genera liderazgos, eso es innegable durante esta ultima década pero no se impulsa la organización estudiantil como gremio en defensa de intereses compartidos.

Y mientras esto sucede ya en Córdoba pasaba que:

“Grupos de amorales deseosos de captarse Ia buena voluntad del futuro exploraban los contornos en el primer escrutinio, para inclinarse luego al bando que parecía asegurar el triunfo, sin recordar Ia adhesión públicamente empeñada, el compromiso de honor contraído por los intereses de Ia Universidad.” Manifiesto de Cordoba